Además tienen problemas como el atraso en el pago de Liconsa e incremento en precio de insumos.

Problemas como el atraso en el pago por parte de Liconsa, falta de agua, incremento en precio de insumos, han provocado que los pequeños productores de leche tengan que vender sus vacas lecheras al mejor postor, incluso al rastro municipal.
Durante el 2020 han enfrentado retos como el sacar adelante a su ganado a pesar del aumento en precios de los insumos, pero también en un estira y afloja con la Federación por la falta de pagos puntuales por parte de Liconsa.
“Nuevamente Liconsa incumplió (el viernes) con los pequeños productores, hay compañeros que han estado vendiendo su ganado a lo largo del año para poder subsistir con el atraso de pagos”, expresó Jesús Márquez, productor en la región de Meoqui.
Dijo que todo lo que va del mes no se les ha dado un solo pago y que desde la última quincena de octubre, la dependencia ya les advirtió que se les pagaría cada quince días y no cada semana, recordó que los pequeños ganaderos viven al día igual que las vacas, pero la diferencia es que los animales no saben si hay dinero o no para darles de comer.
“En lo que va del año muchos han estado vendiendo sus vacas para cubrir las necesidades básicas mientras llega el pago, que se ha estado atrasando de dos a casi cuatro semanas”, explicó.
Entre los grupos de ganaderos han manifestado que algunos han tenido que vender sus animales lecheros al rastro municipal, otros han preferido dejar la actividad para buscar otra opción de trabajo, ya que cada vez ha sido más difícil sobrevivir como pequeño productor lechero.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas

Más Leídos

Destacados

Sumate a

Mundo

Seguinos

Suscribite a nuestro newsletter