El insumo se utiliza para la elaboración de bebidas lácteas, quesos (tipo ricota), jabones íntimos, bebidas energizantes, entre otros productos.
La fabricación y la venta de estos productos, en las que participan 10 empresas en el país, deberán variar próximamente con las nuevas medidas para la cadena láctea, establecidas en un acuerdo ministerial, anunció el presidente Lenín Moreno, en un acto con ganaderos que se llevó a cabo la semana pasada, en Machachi.
Se espera que el acuerdo sea firmado esta semana entre los ministerios de Agricultura y Ganadería; Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca; y Salud Pública.
El sector conoció un borrador de la norma que establece que la comercialización de suero de leche líquido -proveniente de industrias lácteas con certificados de buenas prácticas- será permitida exclusivamente para la elaboración de pulverizados, como el suero de leche en polvo o proteína concentrada de suero. Solo se permitirá su uso en estado líquido para la producir quesos de suero.
Rodrigo Dueñas, gerente de Reylácteos, considera que los productos van a registrar un incremento en sus precios porque ahora se tendrá que hidratar el suero para poder utilizarlo. “Hay que deshidratar el suero (retirar el 94% de agua) y volver a hidratar, los procesos se vuelven más complejos”.
Las empresas importan actualmente suero en polvo para la elaboración de chocolates, helados, entre otros productos. En el primer semestre del año se importaron 160,8 toneladas métricas de suero en polvo, que representan USD 151 000, según datos del Banco Central del Ecuador.
Rodrigo Gallegos, presidente del Centro de la Industria Láctea (CIL), explica que en el escenario inmediato las empresas que usan el suero líquido como insumo, lo importarán en polvo, puesto que no cuentan con las maquinarias adecuadas para pulverizarlo.
De acuerdo con el borrador del acuerdo, al que accedió la industria, se excluye de la restricción el uso del suero lácteo líquido para la elaboración de quesos tipo suero, como el ricota. Una de las firmas que lo produce es Floralp.
La empresa ofrece al mercado cinco productos que tienen como base el suero. Diariamente, se abastece de 200 productores de leche de Pichincha, Imbabura y Carchi.
Cristian Narváez, gerente general de Floralp, calcula que de cada 10 litros de leche que se usan para producir queso, se recuperan nueve de suero. Aclara que la firma no está preparada para pulverizar el suero, porque no existe un plan de negocios viable para la utilización de este producto.
Mientras tanto, advierte Gallegos, las queseras del país, que proveían del suero a plantas procesadoras, continuarán produciendo suero líquido, que probablemente se convertirá en contaminante.
El Gobierno ha ofrecido al sector lácteo promover un Plan Quesero, cuyo objetivo es fomentar la asociatividad, brindar capacitación y asesoría técnica para la implementación y certificación de buenas prácticas de manufactura. Y se promoverán líneas de crédito en la banca pública.
Los ganaderos ven positiva la prohibición del insumo líquido, porque aseguran que su uso explica, en buena medida, la crisis del sector.
En relación con las bebidas lácteas con suero de leche, el Régimen anunció que solo deberán elaborarse con el insumo en polvo. Además, los productos deberán tener color y sabor diferenciado a la leche entera, y cantidad de proteína superior a la leche entera.
Gallegos cree que el costo que esto generará implicará que deje de ser un producto rentable, ya que hoy se vende a un precio menor que la leche, para estratos de bajos ingresos.
Al representante del CIL le preocupa que dentro del acuerdo no haya una respuesta adecuada para enfrentar la informalidad en la venta de leche y suero dentro del sector.
Otra preocupación del gremio industrial es la falta de competitividad, resultado de los altos precios de sustentación, lo que podría ser una desventaja en las negociaciones de la Alianza del Pacífico con otros países, alerta Gallegos.
La reforma al artículo 308 del Código Integral Penal (COIP) ratifica la penalización por incumplimiento en los precios mínimos de sustentación en siete productos, entre los que ahora se incluye a la leche. Además, sanciona el uso y comercialización del suero líquido dentro de la cadena láctea.
Representantes de gremios empresariales del país piden al Ejecutivo el veto a esta reforma, pues interfiere con la libertad de las empresas y es una medida proteccionista.