Irlanda y Reino Unido son los únicos países de Europa con un consumo importante de cheddar y se teme que, en el caso de un Brexit no pactado, se produzca una “montaña de cheddar”. En este escenario, los productos lácteos se verán afectados
por unos aranceles más elevados, lo que ya se temía que fuera a ocurrir en marzo, antes de la fecha límite original del Brexit.
Las exportaciones irlandesas de productos lácteos al Reino Unido representaron el 26% de las exportaciones totales de lácteos en 2018. Asimismo, en dicho año, el 35% de los suministros anuales de leche de Irlanda del Norte fue transformada en la República de Irlanda, de cuyo volumen, el 92% se destinó a la elaboración de productos lácteos. Las exportaciones de productos lácteos a nivel mundial superaron los 4.000 millones de euros por segundo año consecutivo y representaron el 33% de las exportaciones totales de alimentos y bebidas.
Irlanda exporta el 90% del total de sus productos lácteos, aunque registró el mayor consumo per cápita de leche fresca del mundo, con un consumo anual de 121 litros por persona. Los suministros nacionales de leche registraron un incremento ligeramente superior al 4%, para alcanzar el nivel récord de 7.600 millones de litros, en relación con 2017, aunque el precio medio de la leche se redujo casi un 6%. El número de vacas lecheras aumentó en más del 3%. 2018 no fue un buen año para los productores lecheros ya que se enfrentaron a unos precios de la leche más bajos y unos costes más altos a partir de abril, con una caída estimada del 34% de la renta
agraria, según el Boletín Exterior del MAPA
