El sector de producción de leche fue de los más impactados por los huracanes Irma y María, que provocaron importantes cambios en el patrón de consumo de los puertorriqueños y obligó a las empresas del sector a reenfocar actividad y diseñar nuevos productos.
Ello agravó la situación de un sector que perdió cerca de un 38% de su mercado de leche fresca durante los pasados 18 años. La pérdida de mercado entre 2017 y 2018 se estimó en cerca de 20%, según el sector de leche de la Asociación de Agricultores de Puerto Rico.
Dicha reducción se atribuye a cambios en preferencias del consumidor, combinadas con mermas en población. La sustitución de su principal producto, la leche fresca, trajo un incremento en consumo de leche de larga vida y de otros derivados.
En 2018 la empresa Suiza Dairy inauguró una planta en Aguadilla, con una inversión superior a los $40 millones, aportando al crecimiento y desarrollo del sector.
No obstante, en días recientes la empresa se ha visto involucrada en una polémica por la importación de leche evaporada elaborada por su matriz en Perú, y que fue objeto de una alerta de la Administración Federal de Drogas (FDA, en inglés) por su contenido y etiquetado.
Negocios entrevistó al gerente general de Suiza Dairy, José Moscoso, sobre estos temas enmarcados en la situación actual del país.
¿Cuál es la situación del sector luego del huracán María?
Hemos tenido una contracción que vino por la migración y también por la falta de energía en los primeros meses. Hicimos los primeros números de 2019 frente a los de 2018, y aunque puede ser un poco engañoso porque estamos comparándonos con un periodo que no es muy representativo, se ve que hay una mejoría en términos de leche fluida. Esperamos que la reposición del Programa de Asistencia Nutricional (PAN) continúe a partir de agosto como se ha anunciado y nos pueda reactivar. No queremos vivir siempre de esto, tenemos que desarrollar también la satisfacción de las necesidades del consumidor y esa es una tarea en la que está toda la industria.
¿Qué está haciendo Suiza Dairy para enfrentar los cambios?
Estamos bien enfocados en hacer productivas nuestras plantas, particularmente la inversión más grande en Aguadilla, que hemos invertido $42 millones. El reto está en dar productos con mayor calidad y funcionalidad, como es nuestra leche de vida extendida refrigerada o nuestra leche de vida extendida que no necesita refrigeración, la UHT, en diferentes formatos. Preparamos la planta para diferentes formatos, tamaños, sabores y tenemos en cartera para este segundo semestre nuevos lanzamientos. También, en el caso de la exportación, estamos abriendo mercados.
¿Cuál es la situación en esa nueva planta de Aguadilla?
Este pasado mes de julio fue bastante productivo, estamos a un 76% de capacidad instalada. Empezamos el año bajito y junio fue bajo también porque estuvimos adecuando la planta a los nuevos formatos.
¿Está Suiza Dairy apoyando al ganadero local?
El compromiso sigue. Le expresamos a ellos que íbamos a comenzar el segundo semestre con un empuje diferente porque estábamos acondicionando la planta. Empezamos julio con muy buen pie y esperamos continuar creciendo y con nuestros niveles de exportación.
¿Cómo van a manejar la alerta de la FDA y la orden de ORIL (Oficina de reglamentación de la Industria Lechera)?
Hicimos un recogido voluntario previo a la emisión de la orden administrativa del regulador, precisamente para evitar algún tipo de controversia. La FDA no ordenó ningún recogido y en las próximas semanas deberíamos estar nuevamente abasteciendo el mercado con las exigencias de la FDA. Trabajamos con el código internacional que rige la producción y características de cada leche, pero FDA tiene exigencias adicionales, y nosotros la vamos adecuar como procede. Con ORIL son trámites administrativos. Somos muy respetuosos de sus disposiciones, no esperamos problemas con eso.
¿Cómo describe el clima económico y de inversión?
A partir de la renovación de la aplicación del PAN y de la esperada repatriación de algunos compatriotas que pudieran regresar a la isla, tenemos optimismo respecto a la estabilidad de la economía de Puerto Rico en este segundo semestre. Confiamos que en la medida en que se regule la aplicación de los fondos destinados para la reconstrucción, se activaría uno de los sectores más multiplicadores de valor para la economía y de circulación de dinero, como es la construcción. El segundo trimestre del año estuvo bastante duro y creo que una de las razones fue la suspensión del programa PAN, pero ahora que se está restituyendo. Esperamos un impacto positivo que aporte a la estabilidad que necesitamos en el comercio.
¿Cómo ve el futuro del sector?
Lo vemos con optimismo. Creo que todas las partes estamos tratando de empujar para el mismo lado y vamos a seguir manteniendo esa postura en beneficio del sector y del país.