El lunes 15 de febrero se cumplirá un año de la asunción de los legisladores. En este tiempo, el líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, se ha convertido en socio del gobierno, que lo apoya, le exige cambios en su rumbo económico y está dispuesto a acordar con la oposición en asuntos estructurales, como el proyecto de ley forestal. El excomandante en jefe del Ejército busca convertirse en un referente político del sector empresarial, del comercial, del productivo y el agropecuario, los dos últimos alejados del Frente Amplio, como coinciden José Mujica y Danilo Astori, entre otros.
El 20 de enero, tras una reunión con el presidente Luis Lacalle Pou, Manini destacó que hablaron de “las medidas a tomar para estimular al trabajo nacional, a las pequeñas y medianas empresas (Pymes)”. Luego fue al Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y afines del Uruguay (Cambadu) y en los días posteriores recibió en su despacho del cuarto piso del anexo del Palacio Legislativo a representantes de la Asociación Nacional de Productores de Leche, la Comisión Nacional de Fomento Rural y la Cámara de Industria de Alimentos (Ciali).
La agenda revela cuánto insistirá Manini con el tema. Mañana se reúne con la Asociación de Feriantes; el martes lo hará con representantes de Prumer, una empresa de envases de plástico, y con la Unión de Transporte Turístico; y el miércoles, con las Cooperativas Agrarias Federadas, la Confederación Granjera del Uruguay y la Cámara de Eventos del Uruguay.
El senador habló con el presidente sobre varias posibilidades de apoyar a las Pymes, como las facilidades impositivas o la flexibilización laboral “para que el pequeño empresario no esté sujeto a las mismas reglas que el gran empresario”.
La respuesta de Isaac Alfie.
Consultado sobre la posibilidad de adoptar medidas en apoyo a las pymes, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Isaac Alfie, dijo ayer a El País que “está claro que la situación sanitaria no está terminada, por tanto sigue la emergencia”.
El contador y economista aseguró que “desde el momento en que sigue la emergencia, se siguen tomando medidas paliativas por la emergencia, y de hecho se han tomado una cantidad en estos meses; entre ellas está la asignación familiar, el sistema de refuerzos de la Tarjeta Uruguay Social, las canastas, la continuación de cierta bonificación en los cargos fijos de UTE y OSE. Todo eso siguió, así como incentivos al empleo, más allá de la red de protección social histórica del Uruguay, que a esta altura debe de tener 70 u 80 años”.
“Debemos tener claro que en economía hay dos cosas: las transitorias y las permanentes. Esto definitivamente va a ser transitorio y por lo tanto así hay que tratarlo. Hay que diferenciar lo transitorio de lo permanente”, insistió Alfie, que se excusó de responder otras preguntas.
Manini insiste con Keynes.
El Ministerio de Relaciones Exteriores encorsetó a Ernesto Talvi. Como canciller, el entonces líder del Partido Colorado debía limitarse a hablar de asuntos diplomáticos. Para evitar ese tipo de ataduras, Manini prefirió no asumir como ministro, sino como senador. Para jugar en toda la cancha. Para opinar de la política sanitaria y la económica.
En abril del año pasado, el senador cabildante dijo en Canal 4 que de la pandemia se sale con mucha inversión, que habrá que mover la economía en base a obra pública e incluso arriesgó, en un video que publicó en redes sociales, que el gobierno no debió aplicar el aumento de tarifas que estaba previsto a partir del 1° de abril.
Unos días después, Talvi comentó en el programa En La Mira de VTV que hablar de John Keynes o Milton Friedman “no tiene sentido” en la actualidad y pidió a Manini que no se entrometa en asuntos económicos que debe definir el Poder Ejecutivo. “Es un sinsentido, con todo respeto; no me meto en temas militares, este es un tema económico. El debate está superado hace 50 años. No hay sentido en hablar de Keynes y Friedman”, expresó Talvi.
Con el excanciller lejos del gobierno, Manini insiste con Keynes, el economista inglés que proponía apostar por la intervención pública directa en materia de gasto público. “Recuerdo una frase que yo le dije al presidente, que tomó estado público, que fue ‘de esto se salimos con Keynes y no con Friedman’. Realmente yo creo que hay que tener mucho más dinamismo en el apoyo a determinados sectores. Yo no hablo de la renta básica universal, creo que no es apropiado en un país como Uruguay, pero sí creo que se tiene que dar oxígeno a los generadores de empleo. No se puede, en el momento de la mayor crisis de empleo de los últimos años, empezar a achicar el gasto del Estado en este momento, como se hizo a partir del decreto de marzo. Fue pre-pandemia pero se mantuvo”, dijo el senador en una entrevista publicada ayer en El Observador. “En esta coyuntura es preferible subir el déficit fiscal y no que un tendal de empresarios nacionales queden por el camino”, agregó, y consideró que en el equipo económico hay “cierta ortodoxia”.
Tras desencuentro, recibe a la Federación Uruguaya de la Salud
El senador Guido Manini Ríos fue director del Hospital Central de las Fuerzas Armadas y director nacional de Sanidad Militar, cargo desde el que entabló una relación con el ministro de Defensa de entonces, Eleuterio Fernández Huidobro, con quien compartía además el gusto por la historia.
Aquellos años al frente de la sanidad militar lo llevaron a asumir como presidente de la Comisión de Salud del Senado, donde este miércoles se recibirá a la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) para escuchar sus consideraciones acerca de la situación de los trabajadores de la salud.
Dirigentes de la FUS fueron el pasado miércoles 27 de enero a la comisión pero no fueron atendidos. “Nosotros fuimos convocados a reunirnos con la Comisión de Salud del Senado el día 21, posteriormente se nos llamó para el día 27. Pero resulta que llegamos hoy a la reunión y se nos informa que no estamos en agenda y que el presidente de la comisión, el senador Guido Manini Ríos, resolvió que nos van a recibir el 25 de febrero”, dijo Jorge Bermúdez, secretario general de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS).
“El Fogata” aseguró en rueda de prensa que “en 25 años de dirigente sindical” nunca había visto algo así, y remarcó que la discusión que proponen no admite mayores demoras. El dirigente sindical reclamó “información cristalina, transparente” sobre el proceso de compra de las vacunas contra la COVID-19, y agregó que “quien debe encabezar ese proceso es el Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Junta Nacional de Salud”. Por su parte, Manini consideró “lógico” que la negociación por las vacunas haya pasado del MSP a Presidencia.