La ciencia ha situado entre sus prioridades analizar la relación entre un microbioma intestinal equilibrado y saludable y el posible desarrollo de enfermedades como la obesidad, la diabetes e, incluso, el cáncer. Además, de un tiempo a esta parte numerosas investigaciones se han activado en torno a las consecuencias que un intestino descompensado puede tener en el estado anímico, la salud mental, infantil o inmunitaria.
Este fue uno de los temas de debate entre los asistentes al XV Workshop de la Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos, celebrado recientemente en Sevilla. Un foro donde se confirmó el creciente interés de los consumidores por su salud intestinal. Sirvan como ejemplo las conclusiones de la encuesta publicada en 2023 por la International Probiotics Association (IPA).
Entre más de 8.000 consumidores de ocho países europeos (uno de ellos España), casi la mitad (44 %) reconoció consumir alimentos o suplementos alimenticios con probióticos. Sin embargo, solo el 67 % fueron capaces de reconocerlos.
Efectivamente, los probióticos, entendidos como aquellos microorganismos vivos que cuando se administran en cantidades adecuadas confieren un beneficio para la salud, desempeñan un papel clave (junto al ejercicio y una dieta saludable) para lograr una buena salud intestinal. De ahí el creciente interés por conocer los últimos desarrollos o, al menos, las tendencias e investigaciones que se están llevando a cabo en este campo actualmente.
El 44 % de los consumidores europeos encuestados por la Asociación Internacional de Probióticos en 2023 reconocieron consumir ya alimentos o suplementos alimenticios de este tipo
Una de ellas es la que se enfoca en cómo los probióticos pueden ayudar al desarrollo del bebé y a que este tenga un microbioma saludable. En Sevilla, expertos de Nestlé presentaron la fórmula infantil NAN SUPREMEPro. Esta combina una cepa probiótica (B. infantis LMG 11588) con distintos olisacáridos de leche humana.
“Dicha solución, ya en el mercado, consigue un efecto sinérgico mayor para reforzar el sistema inmunitario en lactantes”, resalta Lorena Valdés, investigadora del Departamento de Investigación en Microbiología del Área de I+D+i de CNTA, presente en la puesta de largo de este elaborado.
Valdés señala igualmente que en el ámbito del control de la obesidad “hay investigaciones que resultan muy prometedoras ya que el uso de probióticos podría tener efectos preventivos y terapéuticos sobre enfermedades asociadas a la disbiosis intestinal como la obesidad, la desnutrición, alergias e intolerancias alimenticias o hígado graso no alcohólico, entre otras”.
A la vista de estas y otras iniciativas similares, su conclusión es contundente: “La ciencia quiere ir más allá y está estudiando la relación entre le intestino y el cerebro y cómo la salud digestiva tiene una influencia directa en nuestro estado anímico y nuestra salud mental”.
LÁCTEOS, BEBIDAS, PANES Y BOLLERÍA
No obstante, todo parece indicar que el mercado de probióticos irá a más. La consultora Mordor Intelligence ha puesto números a esas previsiones. Según sus estimaciones, el mercado mundial de los probióticos se situó en los 64.946 millones de euros en 2023 y crecerá en el próximo lustro hasta alcanzar los 93.221 millones de euros en 2028.
En este contexto, poco a poco se empieza a abrir hueco entre los lineales los elaborados con probióticos. Ahí están, sin ir más lejos, algunas de las últimas novedades en el mercado como los yogures y helados proteicos y con probióticos de la firma Proasis o las barras de gelatina para favorecer la digestión y salud gastrointestinal promovidas por la agroalimentaria Baigong Food.
En el caso de CNTA, su experiencia contrastada en formulación, caracterización y evaluación de capacidad probiótica ya le ha permitido participar en el desarrollo de leches en polvo y yogures líquidos con probióticos para beneficiar el tránsito intestinal, el estado nutricional o la estimulación del sistema inmune. Por ejemplo, junto con la empresa Nutris Ingredients ha colaborado en la validación de los parámetros de calidad en probióticos y postbióticos integrados en matrices lácteas, por ejemplo.
Lorena Valdés (CNTA): «La ciencia está estudiando la relación entre el intestino y el cerebro y cómo la salud digestiva tiene una influencia directa en nuestro estado anímico y salud mental»
Otro caso destacado es el de Nucaps, que ha lanzado con la empresa Dairypet, YowUp, un yogur probiótico para mascotas que cuida y refuerza su sistema inmunológico. «Y actualmente estamos ultimando otro probiótico de origen vegetal para una gama de bebidas que una spin off de una universidad andaluza pretende lanzar en breve», confirma su CEO, Mariano Oto. Este último desarrollo, destinado a mejorar el metabolismo así como el sistema inmunológico del consumidor, ha conllevado un minucioso trabajo de seis meses de duración.
Por otro lado, Nucaps se encuentra involucrada en otros proyectos similares. «En realidad, estamos trabajando en distintas formulaciones a un coste económico neutro para hacer accesible al cliente final bebidas enriquecidas con probióticos que mejoren su salud intestinal», apunta su CEO. Así, una industria va a usar uno de esos elaborados «en mayo» para la producción de vinos desalcoholizados. La firma también ha empezado, junto al Basque Culinary Center (BCC), el desarrollo de panes y bollería con probióticos: «El reto es que las bacterias sigan vivas tras el proceso de horneado».
OTRAS INVESTIGACIONES EN MARCHA
Al margen del apartado más comercial, se está investigando en diferentes metodologías para caracterizar probióticos. Uno de esos proyectos es Predismet, en el que participa CNTA en colaboración con la Universidad de Navarra y con la financiación del Gobierno de Navarra. La investigación ha permitido establecer metodologías consensuadas y extrapolables a ensayos in vivo (con animales) para caracterizar bacterias potencialmente probióticas.
En concreto, Predismet ha permitido a las empresas productoras y distribuidoras de ingredientes probióticos (y también prebióticos) evaluar las posibilidades de que una bacteria demuestre funcionalidad en los ensayos in vivo. Además, les ha ayudado a seleccionar específicamente el efecto saludable atribuido a cada microorganismo.
Dentro de este proyecto, se han identificado tres cepas ya en proceso de patente:
- Cepa de Latilactobacillus sakei con potencial antiinflamatorio.
- Cepa de Companilactobacillus alimentarius con potencial modulador de la respuesta inmune.
- Cepa de Lactiplantibacillus plantarum con potencial para combatir la obesidad.
«Estos hallazgos son prometedores y podrían tener un impacto significativo en la salud y el bienestar, a través de la regulación del microbioma y la promoción de funciones específicas en el cuerpo», incide Valdés.
Por otro lado, el Proyecto Hidropep, también financiado por el Gobierno de Navarra, tiene como propósito fundamental aprovechar las fuentes vegetales (proteicas) navarras para obtener ingredientes de valor añadido.
En palabras de la investigadora de CNTA, «una de las estrategias para valorizar estas fuentes vegetales es la fermentación, que permite la obtención de dos compuestos bioactivos: el GABA y los Ácidos Grasos de Cadena Corta». Unos compuestos que «pueden tener efectos positivos en la salud».
Algunos de ellos «incluyen la modulación de la respuesta inmune, la reducción de ansiedad y estrés, y la mejora del tránsito intestinal», apostilla. Hidropep, por tanto, se centra en la búsqueda de cepas microbianas potencialmente probióticas que, mediante la fermentación, puedan transformar estas fuentes vegetales en los mencionados compuestos bioactivos.