A través de un extenso comunicado, la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN) manifestó una propuesta para sustituir las importaciones de leche en polvo en el país.
En el escrito, la entidad explica que se trata de poder lograr alianzas público-privadas para reimpulsa la infraestructura de pulverización “que hoy se encuentra subutilizada en diversas zonas del país”. Agregan que con esto se lograría el propósito del Gobierno nacional y Fedegán de fortalecer la seguridad alimentaria y de producción de leche.
La propuesta la planteó el presidente ejecutivo de FEDEGÁN, José Félix Lafaurie Rivera, a la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica. En el documento el dirigente le detalló a la ministra que “la cadena lechera continúa enfrentándose a problemáticas estructurales y situaciones coyunturales que afectan la condición de alrededor de 320.000 pequeños productores de leche y sus familias”.
Dentro de la carta se detalla que hay “Contracción en el consumo de leche”. Señalan que ente 2021 y 2023 ha disminuido aproximadamente 14 litros equivalentes de leche líquida por persona, situación que además el mercado expresa con menor precio pagado al productor.
En el mismo escrito, Lafaurie Rivera expresó su interés en que la estrategia de ruedas de negocios entre la Agencia de Desarrollo Rural, la Agencia Logística de las Fuerzas Militares y el Ministerio de Defensa “se extienda a los derivados lácteos menos perecederos y que esta metodología se amplíe a la Fuerza Aérea Colombiana, la Armada Nacional y la Policía Nacional”.
Con respecto a las pulverizadoras, el dirigente gremial le expuso a la ministra que con esto se podría “aprovechar los tiempos en donde la oferta sube y los precios al productos caen estrepitosamente, porque serían diferentes al tener plantas pulverizadoras. Podríamos tener mayor oferta de leche pero que va a la pulverizadora con precios, no a la baja, sino estables al ganadero; y en las épocas de sequía precios estables para la industria, y no al alza, al usar el almacenamiento”.
Por último Lafaurie respaldó la gestión de la ministra de Agricultura y el lnvima en la lucha contra la comercialización de “leche que no es leche” sino mezclas de lactosuero “que generan un engaño al consumidor y además ponen en riesgo la producción de leche cruda y el ingreso de quienes se dedican a esta actividad. Sin duda, combatir este tipo de actividades contribuye a la formalización de la cadena de valor”.