La industria lechera chilena atraviesa un momento altamente favorable. El Consorcio Lechero reporta que la producción nacional superó récords, impulsada por condiciones climáticas favorables, mejoras en eficiencia y un fuerte impulso comercial hacia el exterior. Estas cifras récord llegan acompañadas de un escenario de oportunidades estratégicas para el sector.
Durante los últimos meses, algunas regiones rezagadas del país experimentaron remontes significativos, reduciendo las brechas productivas entre zonas. La expansión de la infraestructura y una mayor conectividad también reforzaron la capacidad para trasladar leche y productos con menor pérdida y mayor calidad.
Exportaciones y disminución de importaciones fueron condiciones alineadas. En varios rubros, como quesos y leche condensada, los envíos al exterior crecieron entre 15 % y 25 %, mientras que Chile logró reducir sus compras externas de productos lácteos en cerca de 9 %, beneficiando a los productores locales.
A pesar del panorama favorable, el consumo doméstico sigue siendo una asignatura pendiente: las cifras de demanda interna no logran crecer al mismo ritmo que la producción y las exportaciones. La industria identifica en ello un desafío para garantizar que el impulso exportador no se aloje sobre mercados desatendidos.
Para capitalizar esta coyuntura positiva, el sector lácteo español apunta a fortalecer los sistemas de refrigeración y cadena de frío, mejorar acuerdos comerciales, trabajar en trazabilidad y diferenciar productos en calidad y sostenibilidad.
El escenario proyecta que Chile puede pasar de un rol exportador tradicional a convertirse en referente latinoamericano en innovación lechera: productos funcionales, diferenciaciones regionales y estrategias de marca país figuran como apuestas de futuro.
Fuente: America Retail
