El brote ha sido confirmado el 6 de marzo de 2025, tras la aparición de síntomas clínicos el 3 de marzo en una explotación con 1.418 bovinos de leche. La presencia del virus fue ratificada por el Laboratorio Nacional de Referencia, y actualmente se encuentra en proceso la determinación del serotipo/topotipo del patógeno.
Medidas inmediatas para contener el brote
Para evitar la propagación del virus, las autoridades húngaras han aplicado las medidas de control establecidas en el Reglamento Delegado 687/2020 de la Unión Europea (UE). Estas acciones incluyen:
- Inmovilización de la explotación afectada.
- Sacrificio y destrucción de los animales contagiados y sus productos derivados.
- Creación de una zona de protección y vigilancia de 3 km alrededor del foco.
- Zona de restricción ampliada a 10 km, con prohibiciones para el movimiento de ganado.
Además, como medida preventiva, se han implementado restricciones más amplias:
- Paralización de los movimientos de animales durante 72 horas en la región de Transdanubio y el distrito de Pest.
- Prohibición de concentraciones de animales en el condado de Győr-Moson-Sopron hasta el 17 de marzo.
- Suspensión de la caza en la zona afectada.
- Confinamiento obligatorio de animales cautivos en lugares turísticos.
Análisis epidemiológico: Un brote sin origen claro
Según las investigaciones iniciales, no se han detectado entradas recientes de animales en la explotación afectada, lo que complica la identificación del origen del virus. Sin embargo, se están rastreando las salidas para determinar posibles vínculos epidemiológicos.
El brote de Fiebre Aftosa en Hungría se produce apenas dos meses después del registrado en Alemania en enero de 2025, cuando se detectó la enfermedad en una explotación de búfalos cercana a Berlín. A pesar de la coincidencia temporal, no se ha establecido una relación epidemiológica entre ambos brotes.
Desde el MAPA se ha recomendado a los sectores ganaderos:
- Refuerzo de los protocolos de limpieza y desinfección de los medios de transporte.
- Aumento de la vigilancia pasiva en explotaciones ganaderas.
- Notificación inmediata de cualquier sospecha de Fiebre Aftosa a los servicios veterinarios oficiales de cada comunidad autónoma.
¿Qué es la Fiebre Aftosa y por qué es tan peligrosa?
La Fiebre Aftosa (FA) es una enfermedad altamente contagiosa que afecta a animales rumiantes y porcinos. Está incluida en la lista única de enfermedades de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y en la categoría A de enfermedades de la UE, lo que significa que no debe estar presente en territorio comunitario y debe ser erradicada con urgencia.
Síntomas clínicos de la Fiebre Aftosa
Los animales infectados pueden presentar:
- Fiebre alta.
- Salivación excesiva.
- Vesículas en mucosas bucales y espacios interdigitales.
- Disminución del consumo de agua y alimento.
- Alta morbilidad, con afectación del 80% de los animales en algunos casos.
Impacto económico y comercial de la Fiebre Aftosa en la UE
Efecto en la producción ganadera
Un brote de Fiebre Aftosa tiene graves consecuencias económicas para los ganaderos. La inmovilización del ganado, el sacrificio de los animales afectados y las restricciones comerciales pueden generar pérdidas millonarias en el sector.
En España, donde la ganadería bovina representa una parte clave del sector agroalimentario, cualquier brote dentro de la UE puede impactar la exportación de productos cárnicos y lácteos.
Restricciones al comercio internacional
Los países que exportan carne y productos de origen animal pueden ver cerradas temporalmente sus fronteras, como ha ocurrido en crisis sanitarias anteriores. Algunos mercados internacionales imponen vetos inmediatos a países con brotes activos de Fiebre Aftosa, lo que afecta la competitividad de los productores europeos.
La última crisis en Alemania y la vigilancia reforzada en Europa
El último brote registrado en la UE antes del de Hungría fue el detectado en Alemania en enero de 2025. En ese caso, la enfermedad apareció en una explotación de búfalos cerca de Berlín, lo que llevó a establecer una zona de restricción de 6 km.
Las autoridades alemanas han informado que las restricciones podrían levantarse el 11 de abril, pero el nuevo foco en Hungría genera incertidumbre sobre la evolución de la enfermedad en el continente.
Medidas clave para prevenir nuevos brotes en la UE
Para evitar la propagación de la Fiebre Aftosa, la UE y los Estados Miembros han reforzado varias estrategias:
- Controles sanitarios estrictos en las fronteras y explotaciones ganaderas.
- Campañas de información y sensibilización dirigidas a ganaderos y transportistas.
- Vigilancia epidemiológica para identificar rápidamente nuevos focos.
- Inmunización y protocolos de bioseguridad en regiones con alto riesgo de transmisión.
Una alerta sanitaria que exige máxima precaución
El brote de Fiebre Aftosa en Hungría supone un serio desafío para la sanidad animal en la UE. A pesar de los esfuerzos por contener la enfermedad, el riesgo de expansión a otros países europeos sigue presente.
El refuerzo de la vigilancia epidemiológica y la aplicación estricta de las medidas de control serán claves para evitar nuevas crisis sanitarias en el sector ganadero. La colaboración entre autoridades, veterinarios y ganaderos será determinante para minimizar el impacto de esta enfermedad en la economía agroalimentaria europea.