Adalberto Velasco Antillón, presidente de la Unión Ganadera Regional de Jalisco (UGRJ), explicó que aunque el precio al que Liconsa y otras empresas compran la leche a los productores siempre ha sido un tema sensible, a finales del año pasado se movió el mercado.
Antes de la baja del precio del dólar las empresas lecheras buscaban comprarle a productores nacionales, ante los altos precios de la leche importada. Sin embargo, a finales de 2022 ya estaba más barato el polvo importado por tipo de cambio, y las compras de leche nacional se desplomaron.
“Entre 7.50 y 8 pesos cuesta rehidratar un litro de leche en polvo del extranjero, que es la que usan para ciertos productos, pero es descremada, no entera. Mientras que a productores nacionales nos exigen mayor calidad, más parámetros y contenidos de grasa butírica, lo que no tiene la descremada, y nos pagan 9.5 a 10.60 (pesos por litro)”, explicó Velasco.
Por esta diferencia en los precios ha crecido la demanda de leche importada en polvo.
Sólo entre enero y abril de este año, México importó leche por 448.2 millones de dólares, el monto más alto para un periodo igual desde que comenzó el registro en 1993, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
Ante las menores ventas de leche local, algunos ganaderos en Jalisco se han visto orillados a tirar el producto y vender sus vacas.
“Como productores nos quieren pagar a 8 pesos (el litro), pero no se vale porque la calidad es más que la descremada. Además, a los productores les cuesta 9 pesos hacer un litro. (Al consumidor se) lo venden al precio y (a los ganaderos) se lo quieren comprar más barato”, lamentó Velasco Antillón.
Señaló que se requieren políticas públicas para etiquetar y distinguir los auténticos productos lácteos de los que no lo son.
“Han tirado leche en Encarnación de Díaz, Lagos de Moreno, San Juan de los Lagos, por ejemplo. Ha habido ganaderos que ya vendieron vacas porque no les ajusta para mantenerlas. Hay 15 mil familias que dependen de ello”, lamentó.
Aparte, Ana Lucía Camacho, Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno estatal, afirmó que se está apoyando a los ganaderos con incentivos económicos y “acomodando” con distintas empresas la leche que no han podido vender.
Agregó que también trabajan para ayudar al productor a recibir un mejor pago, como capacitación en escuela de lechería, donde se hace investigación para mejorar la calidad del producto y el proceso de venta.
Jalisco es el mayor productor de leche de vaca en el País, con una producción promedio de 5.6 millones de litros al día.
