El cambio de hábitos que impuso la cuarentena le generó a la cooperativa láctea Cotar otra razón para sentirse orgullosa del volantazo pegado a principios de 2019. En ese momento, la empresa -acorralada por deudas y pedidos de quiebra- definió independizarse de las grandes cadenas y concentrarse en los comercios de cercanía, para acortar la cadena de pagos y mejorar su ecuación financiera. La estrategia resultó exitosa y hoy ya proyectan finalizar el año con una producción semanal de 700.000 litros, 10 veces más que al inicio de esta nueva etapa.
No se trata de una firma más, sino de una muy arraigada en la memoria colectiva de Rosario, al punto que el barrio donde se asienta su fábrica tomó su nombre. La misma planta fue parte central de la nueva estrategia, ya que, por primera vez desde su fundación en 1935, la Cooperativa de Tamberos de la Zona de Rosario Limitada decidió abrir una boca de expendio directa al público.
“El cambio se dio básicamente por una cuestión de necesidad. Nosotros pagábamos la leche al contado y los supermercados lo hacían a 90 días. Financieramente estábamos muy descalzados”, explica a Agrofy News Andrés Marmiroli, socio gerente de Co.ma SRL, firma con la que Cotar celebró un contrato de explotación comercial por cinco años.
Las definiciones de la nueva gerencia permitieron enderezar el rumbo de la industria láctea, que venía de un 2018 muy complicado: se habían liberado casi 300 cheques sin fondos y se acumulaban pedidos de quiebra de proveedores y ex empleados. “La estrategia fue salir de las grandes cadenas y dedicarnos a los locales de cercanía”, agrega Marmiroli.
Aunque representó un gran desafío (fundamentalmente a nivel logístico), el destino pareció haberle echado un guiño. Granjas, minimercados y demás comercios barriales fueron de los sectores que ganaron mercado en el marco de la pandemia: así lo concluyó un artículo de The Economist publicado en octubre, dato que también fue convalidado por actores locales (por caso, desde el sector inmobiliario ya manifestaron que existe un repunte en la economía barrial.
Recuperación
“Lo que más hacemos nosotros son autoservicios chicos, granjas y algunas distribuidoras mayoristas. También hacemos algunos supermercados, pero no las grandes cadenas. Por ahí hay gente en la calle que te dice que no te ve en las góndolas, pero en realidad estamos en todos lados, menos en las grandes cadenas”, reflexiona Marmiroli, quien destaca que en esta nueva etapa lograron volver a colocar la marca en Buenos Aires, Entre Ríos y Capital Federal.
En el peor momento de la crisis, Cotar llegó a producir menos de 70.000 litros semanales. “Nos habíamos quedado prácticamente sin socios”, dice el empresario, que hoy vislumbra un horizonte de 700.000 litros mensuales para finales de este año o principios del próximo. En el medio, la firma supo mantener su plantilla de 170 empleados intacta, incluso a pesar de tener casi 20 operarios entre los grupos de riesgo, sin poder participar del proceso productivo.
Además del local propio en la planta, ahora la firma abrirá su segunda boca de expendio directa. Se trata de un espacio en el Mercado del Patio de Rosario, ubicado frente a la Terminal de Ómnibus. El sitio abrirá sus puertas sobre principios de 2021, tras un proceso de selección que involucró la participación en una licitación pública organizada por la Municipalidad de Rosario.