Los gremios ganaderos y lecheros de Colombia alertan cada año sobre la sobreproducción en el país y la baja capacidad de acopio, afectada también por las importaciones que hacen las industrias durante todo el año.
El inicio del 2021 no fue la excepción y en los primeros cinco días de enero la Federación de Ganaderos de Colombia (Fedegán) ya advirtió que se ha utilizado más del 70% del cupo de importaciones de leche en polvo desde Estados Unidos a 0% de arancel.
La queja tiene como ingrediente adicional la presión a la baja de los precios al productor y la presunta falta de estrategias del Gobierno colombiano para disminuir el impacto de estas acciones que están permitidas por el TLC con EE. UU.
“En la primera hora del año nuevo la industria ya había importado desde EE. UU. un volumen de 5.226 toneladas de leche en polvo sin arancel, que representa el 40% del cupo 2021. Hoy, 4 de enero, ya se ha agotado el 73% de dicho contingente, es decir, han ingresado 9.489 toneladas de leche en polvo”, explicó el presidente del gremio, José Félix Lafaurie.
Las estimaciones del gremio establecen que para el 11 de enero se habría agotado el cupo de importaciones sin aranceles, llegando a las 12.969 toneladas de leche en polvo y dando paso a agotar las importaciones desde Europa, aunque tienen mayor costo de operación.
Los gremios han señalado que 2020 terminó con un total de 17.000 toneladas de leche en polvo almacenadas, un remanente con el que la industria nacional proyectaba que no se necesitaría de importaciones al inicio del 2021.
Fedegán, en un carta dirigida al ministro de Agricultura, Rodolfo Zea, destacó que en 2020 la alta tasa de cambio limitó las importaciones.
Sin embargo, enero comenzó con una tasa de cambio más baja que “estimulará las importaciones y en 2021 sin ningún problema se superarán las 80.000 toneladas de leche y derivados lácteos importados, afectando a los productores del país, pero especialmente a los pequeños ganaderos”.
Hasta el momento, Zea no ha respondido a la misiva enviada por Lafaurie, quien le plantea algunas soluciones para este problemática que se presenta en la industria desde “hace 20 o 30 años”.
Entre las alternativas, se pide mejorar la capacidad de pulverización del país en temporadas de alta producción de leche, así como aumentar los mercados internacionales para la exportación de leche y derivados lácteos.
Finalmente, el gremio ganadero le explicó al Gobierno la importancia de intensificar los planes de alimentación que incluyan lácteos en los estratos 1 y 2 del país, quienes son los que menos consumen leche y que tendrían una participación alta en el mercado.
