El aumento en la producción de los “7 grandes” cortaría una racha de cinco trimestres consecutivos de caída. Sin embargo, la previsión muestra cierta cautela ante riesgos climáticos, con un crecimiento esperado que posiblemente esté por debajo del promedio a lo largo del 2023.
Los excedentes exportables, también se proyecta que crezcan en el último trimestre.
“Todo el mundo estará mirando el mercado chino de lácteos”, dice el reporte, que apunta a los lockdown que se registraron en las principales ciudades del país asiático en lo que va del año, con un impacto negativo en la demanda de lácteos. “Las restricciones disminuyeron en el tercer trimestre, pero la política del gobierno permanece sin cambios, y el riesgo de una mayor interrupción permanece”, apuntó Rabobank, que espera un mercado chino más ausente en 2023.
El informe trimestral sugiere observar de cerca qué suceda con la crisis del gas en Europa, los lockdown en China, los riesgos de La Niña, el mercado de aceite de palma, que se confirme o no el crecimiento de la producción de leche en Nueva Zelanda, la vulnerabilidad de los mercados emergentes y condiciones macroeconómicas débiles a nivel global.
China. Rabobank espera todavía una mayor desaceleración en la demanda de importaciones chinas hasta el primer semestre de 2023. Los stocks locales son elevados, y el crecimiento del suministro de leche es robusto.
Nueva Zelanda. Los márgenes de los productores están cada vez bajo mayor presión. Se espera un crecimiento de la producción de leche en el pico de primavera, pero los riesgos climáticos y las lluvias excesivas cobran gran importancia.