Preocupa a Fedenaga y Fedeagro la poca productividad en el campo venezolano.
Foto: Eduardo Fuentes

La Federación Nacional de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga) declaró al sector en estado de emergencia tras los recientes apagones que han afectado considerablemente la operatividad del gremio, minimizando la producción y oferta de alimentos.

La declaración fue expuesta a través de un comunicado, donde Fedenaga detalla que la capacidad de refrigeración y almacenamiento de productos lácteos terminados ha experimentado una reducción de la demanda de leche al productor, con incidencia en los precios, y que tendrá repercusión en la oferta.

Asimismo, señala que la falta de energía eléctrica ha propiciado los delitos contra los productores y sus familias y los trabajadores del sector.

También han causado daños a la propiedad como el abigeato, homicidio, hurto, robo y secuestro, según lo señala el comunicado del gremio ganadero.

Por su parte, el presidente de Fedeagro, Aquiles Hopkins, afirma que “el gobierno no ha tomado las medidas necesarias para hacer frente a las repercusiones de las fallas en el fluido eléctrico sobre el sector productivo.

Puntualizó que “La crisis eléctrica viene a ser un golpe más a la producción nacional, pero lo preocupante de esto, es que no se está haciendo absolutamente nada para revertir esta situación”.

El representante del gremio agrícola considera que “el gobierno nacional debería estar sentado en conjunto con el sector privado, para ver cómo se revierte está situación”.

Hopkins criticó las medidas que está tomando el Ejecutivo para solucionar la crisis que afecta al país, porque a su juicio, no son las adecuadas.

Reiteró que después que el país abastecía más del 70% del consumo de alimentos, pasó a abastecer tan sólo el 20% del consumo nacional.

Por otra parte, la federación también denunció que a 20 días de que se inicie la siembra de maíz, el país no cuenta con las semillas para iniciar el proceso.

“En Venezuela no hay semillas, prácticamente no hay fertilizante y tampoco tenemos agroquímicos”, dijo al afirmar que el gobierno “monopolizó” la distribución de los insumos que se utilizan en el proceso de siembra nacional.

Sin energía faltan alimentos
A juicio del sociólogo Edison Arciniegas, director Ejecutivo de la Organización no gubernamental Ciudadanía en Acción, no hay energía para la producción de alimentos.

Esta ONG se encarga de realizar estudios sobre la alimentación de los venezolanos y sobre la seguridad alimentaria.

El experto explicó que el problema de la producción alimentaria en el país se debe primero a que no hay energía para producir primariamente, es decir “tenemos la cadena de insumos productos de los alimentos que requiere de 9 mil megavatios desde la producción del fertilizante hasta la energía que necesita el frigorífico.

Agregó que “antes del apagón se contaba con 13 mil 500 kilovatios de energía, pero los recientes apagones hicieron que bajara la cantidad de kilovatios en 4.500”.

“Esto se traduce en el tema agrícola, en que el trasfondo de las carencias alimentarias es energético”, dijo el sociólogo.

Para poner un ejemplo concreto, citó el circuito risícola del estado Guárico que puede producir en óptimas condiciones arroz para alimentar a 35 millones de consumidores, sin embargo, actualmente no se está sembrando arroz ni para 5 millones de personas.

Agregó que el otro factor que influye en la producción de alimentos es el relativo a las políticas públicas implementadas por el estado venezolano “que puso en marcha una política de “dumpin” alimentario que generó la crisis que tenemos hoy”, dijo.

De aquella importación masiva de quesos, pollo y carne del Mercosur que el estado traía y que venía por debajo de los costos reales; viene la no capacidad de Venezuela de producir los alimentos requeridos.

Y por último dijo que “el estado priorizó la importación por encima de la producción.

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