Aunque México produce la mayoría de la leche líquida para su propio consumo, las importaciones de este producto aún son necesarias a fin de complementar la producción nacional para satisfacer la demanda. México importa alrededor del 30% de sus necesidades de leche líquida.

Estados Unidos se ubicó como el principal proveedor de leche líquida durante 2018, con casi el 100% de la cuota de mercado, con un pequeño volumen de importaciones de Francia.

Por el contrario, el pronóstico para las exportaciones de leche líquida en 2019 se mantiene en 8,000 toneladas. En 2018, las exportaciones totales de México fueron de 7,000 toneladas, un aumento del 19% con respecto al año anterior, aunque aún disminuyó de su nivel alto en 2016.

Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones de leche mexicanas (65%), seguido por Guatemala (31%) y Cuba (2 por ciento).

Mercado de leche líquida
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha hecho del mejoramiento de los medios de vida de los pequeños productores agrícolas en regiones económicamente marginadas de México una pieza central de su administración.

La administración creó una serie de nuevos programas de apoyo a la agricultura para ayudar a lograr los objetivos de aumentar los ingresos rurales, mejorar la seguridad alimentaria y la autosuficiencia en la producción de ciertos productos básicos.

De acuerdo con los objetivos declarados de la administración, estos programas agrícolas se enfocan principalmente en brindar apoyo a los pequeños agricultores marginados y no a las operaciones comerciales más grandes, con un énfasis especial en los pequeños productores de los estados del sur y centro de México.

En el sector lácteo, el secretario de Agricultura de México, Víctor Villalobos, ha declarado que México será autosuficiente en la producción de leche líquida para el final del período de seis años de la administración.