La ONG Protectora, de defensa de los derechos del consumidor, reclamó por el faltante de segundas marcas de leches en los supermercados cordobeses y por el alto precio que han fijado las primeras marcas.
La ONG presentó una nota ante Defensa del Consumidor en la que detallan que, mientras que en marzo de este año se pagaban nueve pesos por litro de leche al productor, el consumidor debía abonar en góndola entre 42 y 48 pesos.
“Hicimos un pedido formal para que el organismo intervenga con controles e investigación por el aumento injustificado de la leche fluida y refrigerada, y por la fijación artificial de precios y la imposición que están haciendo las grandes marcas”, dijo Mariela Moncada, una de las apoderadas de la ONG que tiene presencia en todo el país.
“La única marca de leche fluida contemplada en el programa Precios Cuidados es La Armonía, que es la segunda marca de La Serenísima, pero no se consigue en ningún supermercado. Los empresarios adujeron en distintos medios de comunicación que se trata de una falta de producción por estacionalidad, pero si realmente fuera así faltarían todas las marcas y no solamente las más baratas”, explicó la abogada.
En la nota presentada ante el organismo oficial, la ONG detalló: “Solicitamos al poder instructor y de investigación de la institución que investigue las conductas de las empresas lácteas que comercializan sus productos en la ciudad de Córdoba y sobre todo las que tienen cooptada más del 70 por ciento de las góndolas de supermercados a fin de determinar posibles violaciones a la ley de Defensa del Consumidor, a la ley de Defensa de la Competencia y a la Nueva Regulación de las Relaciones de Producción y Consumo”.
Asimismo, pidió que se aporten las pruebas necesarias y de hallar alguna infracción a la normativa en vigencia, se corrija la distorsión a fin de evitar mayores perjuicios a los consumidores.
A su vez, Moncada denunció que las grandes cadenas de supermercados no dejan ingresar a marcas locales, como Windy, La Lácteo o Manfrey.
“No nos pueden tener como rehenes para que compremos sólo una marca de leche y que encima es la más cara. Yo insto a los consumidores a que si no encuentran las marcas más baratas, no las compren y hagan su reclamo individual ante Defensa del Consumidor, para que el organismo controle a los supermercados donde no hay variedad de productos”, concluyó la especialista.