De acuerdo con cifras de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), entre enero y agosto se adquirieron US$ 232,9 millones de productos lácteos, un 7,3% más que en el mismo período del año pasado, cuando se importaron US$ 217 millones.
Nueva Zelandia se volvió a posicionar como el principal mercado para adquirir lácteos, concentrando un 22,2% de las compras (US$ 51,7 millones). Las compras a este país subieron un 39% respecto al lapso enero-agosto de 2019.
En segundo lugar quedó Estados Unidos, con US$ 50,9 millones, seguido por Argentina con US$ 44,8 millones.
En cuanto a los productos, el índice fue liderado por los quesos, con 33.839 toneladas y US$ 129,5 millones. Luego quedó la leche descremada en polvo, cuyas compras totalizaron 9.826 toneladas, por un valor de US$ 24,6 millones.
Por otro lado, las exportaciones de productos lácteos a agosto cayeron un 5,6% respecto de igual lapso del año anterior. En el período, los envíos al exterior totalizaron US$ 108,5 millones. Nuevamente Estados Unidos fue el principal destino de los lácteos nacionales con US$ 28,3 millones, un 17,5% más que en el período enero-agosto de 2019.
La leche condensada fue el principal producto que se exportó, concentrando un 30,1% de los embarques, con ventas por US$ 29,2 millones.
Fuente: El Mercurio