La caída en el poder adquisitivo de los pergaminenses motiva la compra de alimentos más económicos sin medir tal vez las consecuencias que pueden generarse; en estos meses hay muchos comercios que expenden estos productos sin constatar procedencia, trazabilidad e inocuidad.

Aunque las autoridades reconocen la situación económica, piden extremar los cuidados.

Personal del área de Bromatología del Municipio advirtió la presencia de vendedores de aceite comestible a granel (suelto) y ayer por la mañana se los notificó de la prohibición de realizar la comercialización de esa manera como lo estipula el Artículo Nº 524 del Código Alimentario Argentino, ya que no se puede constatar procedencia, trazabilidad e inocuidad del producto generando un riesgo para quienes lo consuman; “estamos trabajando sobre este tema porque notamos que cada vez hay más vehículos entregando este producto en algunos comercios y restaurantes de nuestra ciudad”, advirtió Sabina Salvarezza, titular de esta dependencia local, y en esta misma línea informó que los operativos se realizarán también “en aquellos lugares donde se empezó a vender leche directa del tambo, sin ningún tipo de pasteurización”, señaló la funcionaria sobre estos dos temas que provocan preocupación.

“Cuando adquieran aceites para un comercio gastronómico, venta o para consumo familiar se deberá corroborar que el rótulo esté completo y contenga: RNE (Registro Nacional de Establecimiento) y Rnpa (Registro Nacional de Producto Alimenticio)”, explicó la médica veterinaria Salvarezza al ser consultada por el Diario.

A su vez, cabe señalar que este tipo de comercializaciones se observó en negocios de Pergamino a los cuales se les irá advirtiendo para que dejen de ofrecerlos, caso contrario se procederá a labrar la infracción por violar las normativas vigentes.

Preservar al consumidor

Durante los controles se detectó la existencia de tambores de aceite para su expendio a granel y por tal motivo “le explicamos a la comunidad que dicha práctica se encuentra prohibida porque el aceite comestible destinado a ser fraccionado deberá ser almacenado en recipientes adecuados, mantenidos en todo momento en condiciones de higiene y en este marco la normativa nacional indica que queda prohibido envasarlo en los comercios detallistas y demás lugares de venta al público, como también el expendio ambulante de los mismos”, resaltó la responsable de Bromatología reconociendo que en localidades de la región se están viendo estos procedimientos inadecuados.

Los establecimientos que fraccionan y envasan aceites comestibles, deberán cumplir con las disposiciones generales del presente y, además, disponer de locales destinados exclusivamente a este fin, aprobados por la autoridad competente. “Este tipo de recipientes y su mercadería una vez detectados en los comercios, son automáticamente decomisados y las actuaciones son elevadas al Juzgado de Faltas Municipal”, señaló la funcionaria.

¿Qué pasa con la leche suelta?

Por la crisis, mucha gente está comprando leche suelta en botellas plásticas o de vidrio y esta situación fue advertida por Bromatología a los pergaminenses que el consumo de leche cruda puede causar serios problemas de salud; en este sentido desde el área de Municipalidad recomiendan tomar precauciones, aunque reconocieron que este tipo de prácticas se observa en las redes sociales y negocios de barrio a raíz del precio de la leche en sachet y en caja.

Esta situación de la leche cruda no es nueva pero quienes trabajan en el tema piden que se utilice la leche pasteurizada para evitar enfermedades; “es difícil detectar los problemas que originan los alimentos, la mayoría pasan por la guardia y se registran como abdomen agudo que tienden a desaparecer en 48 horas. En cuestiones más complejas, se puede encontrar escherichia colli. Con la leche pasa lo mismo”, alertó Sabina Salvarezza mostrando su intranquilidad por distintos contaminantes que puede haber en este alimento que generalmente es empleado en los más chicos.

A pesar de que la venta de leche sin pasteurizar está prohibida en todo el país, el lechero volvió como consecuencia del aumento del precio de este producto y la búsqueda de una salida económica de los tamberos ya que la vuelta al lechero no es una modalidad, sino un riesgo sanitario que implica el consumo de leche sin tratamientos correspondientes y es algo que está vigente en el Código Alimentario Nacional que prohíbe la venta de leche cruda en su artículo 556 bis.

Alimentos en redes sociales

Bromatología advirtió a los vecinos acerca de la venta no autorizada de alimentos perecederos, como carnes y pescado, a través de las redes sociales teniendo en cuenta que se emplean estos medios porque son una buena herramienta de divulgación masiva, utilizada en algunos casos por comercios debidamente autorizados y habilitados para la manipulación y venta de alimentos pero en otros casos por personas que venden productos de manera ilegal o irregular.

“En los últimos tiempos se vienen observando publicaciones de venta de artículos altamente perecederos que requieren todo un procedimiento y un resguardo para que sean aptos para el consumo humano, que en los casos de estos ofrecimientos no están asegurados y conllevan un enorme riesgo para los vecinos”, señaló Salvarezza.

“Es fundamental contar o requerir algún tipo de información que permita constatar que se trata de establecimientos debidamente controlados y habilitados, porque de otra manera se corre el riesgo que el producto esté contaminado o puede haber presentes parásitos o bacterias que conllevan un serio riesgo para la salud de quien lo consume”, recomendó la funcionaria.

Por último, Sabina Salvarezza apeló a la conciencia de los vecinos “para que se abstengan de comprar alimentos de dudosa procedencia y ante cualquier duda se comuniquen con Bromatología para evitar de esta manera adquirir productos que pueden acarrear serias enfermedades a chicos y adultos”.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas

Más Leídos

Destacados

Sumate a

Mundo

Seguinos

Suscribite a nuestro newsletter