El siguiente paso fue expandir el negocio, con más producciones en la Argentina, pero sobre todo con fuertes inversiones en Uruguay y en Brasil, donde al día de hoy es uno de los jugadores fuertes en azúcar, etanol y energía. En la actualidad, Adecoagro tiene 10.000 empleados, 600.000 hectáreas productivas y líder en producciones tecnológicas y rentables con especial foco en sustentabilidad. En Christofersen, al sur de Venado Tuerto, tienen un establecimiento con 14.000 vacas en ordeñe, que producen 600.000 litros de leche por día. Y es además ejemplo de desarrollo sustentable. La bosta de esas vacas va a un biodigestor y genera energía eléctrica que alimenta la red del pueblo. Ese modelo sustentable de producción es uno de los argumentos que el equipo de marketing utilizó para reposicionar en el mercado la marca Las Tres Niñas.

Un nuevo inversor, esta vez del mundo cripto

Este mes, una de las empresas de criptomonedas más grandes del mundo vio posibilidades de negocios y decidió invertir en Adecoagro. Se trata de Tether Holdings Limited, la compañía que opera la cripto USDT, que por medio de una operación abierta en el mercado de los Estados Unidos adquirió poco más de 10.000.000 de acciones de la empresa liderada por Bosch, por un valor de poco más de 100 millones de dólares.

Me equivoqué, punto

Sin embargo, no todo fue color de rosas. Con una empresa bien capitalizada y con directivos inquietos, es fácil asumir riesgos y que esas decisiones no siempre sean las más atinadas.

“En un momento, en Brasil, nos metimos con el café. Desarrollamos 1500 hectáreas de café y teníamos todo listo para desarrollar otras 1500. Era un proyecto de 3000 hectáreas de café que es algo relevante, estaba bueno. Y pasamos ocho años perdiendo plata.  Nos metimos a fondo y no le encontramos la vuelta. Y bueno, chau. Vendimos y nos fuimos”.

Pese a este traspié, o a otro de una láctea en Córdoba, que tuvo que vender “por un dólar” porque tampoco funcionó, el espíritu de la compañía fue siempre innovar y probar, incluso corriendo algún riesgo. “Para tener un buen negocio tenés que estar dispuesto a perder. Nosotros tenemos como uno de los valores la innovación. Y la innovación implica que te podés equivocar. Todos tenemos que estar dispuestos a aceptar errores. El problema es equivocarte y no reconocer que te equivocás. Cuando alguien se equivoca y está tratando de justificar por qué y poniendo “peros”, no va. Me equivoqué, punto. Si no reconocemos los errores, no podemos corregirlos”, sintetiza el CEO.

Las expectativas con el gobierno de Javier Milei, las diferencias a la hora de invertir (y trabajar) en la Argentina, Uruguay y Brasil, la relación y el legado de su padre y qué lectura hace sobre el futuro del agronegocio en la Argentina, fueron algunos de los temas que Mariano Bosch conversó durante su participación en el ciclo de entrevistas La Huella, el segmento de Agrofy News dedicado a conocer más de cerca cómo trabajan y cómo piensan los principales actores del campo en la Argentina y la región.