Los líderes en la producción de leche y sus derivados en Colombia siempre han sido los mismos desde hace ya varias décadas. Entre las grandes productoras, los primeros lugares han estado dominados por la antioqueña Colanta, que es la indestronable empresa lechera reina con ventas anuales de $3,4 billones.
En orden le siguen Alpina, ahora en manos españolas, que llega q los $2,16 billones; la suiza Nestlé que, según el último informe oficial de la Superindustria, 2022, vende $2,08 billones; y Alquería, fundada en Rionegro, Antioquia hace 60 años por don Jorge Cavelier quien supo oportunamente trasladar la lechería la sabana de Bogotá. Vende $1,15 billones, pero se trasladó a la sábana de Bogotá.
El quinto puesto de este top ha sido el más peleado; en él suben y bajan empresas que venden en promedio medio billón de pesos. Pero desde hace ya varios años la marca peruana Gloria, fundada en 1941, y con presencia en Colombia desde 2008, se ha mantenido en el top 5 por encima de empresas nacionales de larga tradición como Proleche, Pomar y Freskaleche.
El último gran negocio de expansión del Grupo Gloria, que le pertenece a la familia Rodríguez, la tercera más rica del Perú, y que hoy está en manos de Claudio Rodríguez, hijo de Jorge Rodríguez, uno de los fundadores de la empresa, fue adquirir Nestlé Ecuador y las ocho marcas que maneja en el país.
En su estrategia de expansión el Grupo Gloria ha comprado decenas de compañías en diferentes frentes no solo en su país sino en varios países de América Latina a través de sus cuatro Holdings: Alimentario del Perú S.A., Cementero del Perú, Maningham Holding S.A, y el Fondo de Inversiones Diversificadas S.A.
El grupo está en Argentina, Bolivia, Puerto Rico, Ecuador, Chile, Panamá. A Colombia entró en 2004 con la compra de Algarrra, la tradicional lechera Algarra de la familia zipaquireña Vargas Acosta fundada en 1955. Diez años después consolidó su operación en el país con la adquisición de la empresa santandereana Lechesan, Incolacteos y la barranquillera Conservas California. Hace dos años. En 2018 incursionó con su marca de leche propia Gloría, la cual en solo cinco años ya tiene como la quinta más vendida del país con una mezcla de calidad y bajo precio.
Colanta, una cooperativa de pequeños lecheros que se creció
La más grande empresa del sector es la Cooperativa Lechera de Antioquia – Colanta, creada en 1964 en Don Matías, Antioquia, pero cuyo gran desarrollo se debe a cuarenta años de liderazgo del empresario Jenaro Pérez Gutiérrez (qepd) bajo cuyo mando se convirtió en un emporio, ubicándose entre las 100 empresas más grandes del país. Su volumen de producción le permitió convertir a Colanta en el regulador del precio nacional de leche para defender a los productores.
La empresa que dejó Jenaro Pérez, quien falleció el 6 de septiembre de 2023, cuenta con más de 10.000 asociados, productores que son dueños de toda la cadena y no solo productores primarios. En el cargo, lo sucedió hace 4 años, Sergio González Villa, quien lleva casi cuarenta años en la organización.
Alpina ha pasado de mano en mano, ahora es español
Le sigue Alpina, empresa creada por extranjeros en Cundinamarca. Una historia que inició en 1945 cuando Max Bazinger y Walter Goggel, dos emprendedores suizos, llegaron al Valle de Sopó huyendo de la segunda guerra mundial, y se decidieron por recoger leche para elaborar los primeros quesos maduros en el país, como Emmental, Gruyere y Parmesano, productos poco conocidos en ese entonces.
En los años 40 y 50 construyeron su primera planta de producción en Sopo, desde donde se distribuía a Bogotá. Desde allí y otras cinco plantas, se producen sus reconocidos productos: el kumis, el arequipe, la gelatina Boggy, Finesse, Bon Yurt, entre otros. Un proceso innovador y de nuevos conceptos que lo ha llevado a sacar permanentemente productos. Exporta a varios países y cuenta con plantas en Ecuador y Venezuela.
Entre los accionistas principales están los herederos de los fundadores Banziger y Goggel, y la firma española Belalp Partners International S. L., que es la titular del 33,8 % por ciento, una sociedad propiedad de Robin Cristoph Bolli, según indica el Registro Mercantil en España.
La expansión de la suiza Nestlé en Colombia
La tercera empresa del top cinco es Nestlé de Colombia, una empresa Anglo-Suiza fundada por Henri Nestlé en 1866, fecha en la que abrió su primera fábrica de leche condensada en Suiza. A inicios del siglo pasado se formó lo que se conoce como el Grupo Nestlé e incluyó la producción de chocolate.
Al país llegaron sus primeros productos en 1922 a través de Panamá, y fue tal la acogida que al poco tiempo abrió oficina de distribución nacional, para finalmente en 1944 establecer en su primera fábrica en Bugalagrande, Valle del Cauca, que sigue siendo la principal. Desde allí se produce más del 50 % de los productos que elabora, y a la que se suman las plantas de Valledupar, Caquetá y Dosquebradas, en Risaralda.
En 1984 adquirió Comestibles La Rosa, y a principios de siglo, Nestlé a nivel global adquirió el negocio de Ralston Purina, alimento para animales que se produce en Mosquera, Cundinamarca. Sus marcas más reconocidas en el país son Leche Klim, Milo, La Lechera, Nescafé y Maggi.
La tenacidad de los Cavelier para no perder Alquería fundada por el abuelo
La cuarta empresa es la Alquería (Productos Naturales de la Sabana), fundada en 1959 cuando Jorge Cavelier Jiménez y su hijo Enrique Cavelier Gaviria adquirieron su primera planta de pasteurización en Rionegro, Antioquia. Luego se trasladaron a la finca La Fagua, ubicada en Cajicá, donde le apostaron a la leche procesada y pasteurizada en una época donde la costumbre era el consumo de leche cruda. Desde hace 27 años, el negocio se encuentra en manos de la tercera generación, Carlos Enrique Cavelier, hijo de Enrique.
Desde el año pasado, la empresa pertenece a dos grupos, la familia Cavelier con un 65 %, y el Grupo Mesoamérica con un 35 %. Mesoamérica es propiedad de un grupo de inversionistas centroamericanos con más de 20 años en el negocio de fusiones y adquisiciones, cuyo fundador y presidente es el costarricense, Luis Javier Castro, es uno de los hombres más ricos de Centroamérica. Son además dueños de las cadenas de comida Oma y Presto, y forman parte de Atento, compañía de servicios de relación con clientes. Al año siguiente de la alianza, Alquería, con los centroamericanos, la marca se colocó en el top 5 de las más valiosas del país.
El negocio de la leche se volvió de grandes jugadores internacionales. Atrás quedaron los días de los pequeños productores ros que sacan sus cantinas a vender leche fresca. Pesa la leche en polvo importada que con los TLC firmados le cambiaron el perfil a un negocio que mueve $ 12 billones al año.
