La medida responde a preocupaciones sobre la elevada importación de estos artículos. Ahora, la leche en polvo y el queso mozzarella importados estarán gravados con el 7% del ICMS, la tasa más baja permitida, ya que están clasificados como productos alimenticios básicos, a los que se les prohíbe gravar con la tasa completa del 19,5%.
La nueva norma afecta principalmente a las industrias, que son las mayores importadoras de estos productos en el estado. Además, se retiró para ambos productos el beneficio del presunto crédito ICMS del 4%, un incentivo fiscal. Este cambio evita que el monto sea deducido de otros créditos del ICMS. El gobierno también pretende regular las importaciones procedentes de los países miembros del Mercosur.
Según datos de Agrostat, del Ministerio de Agricultura, Paraná importó 6,5 mil toneladas de leche en polvo en 2023, por un valor de US$ 24,6 millones. De ese total, 2.800 toneladas provinieron de Argentina e igual cantidad de Uruguay, con costos de US$ 10,9 millones y US$ 10,8 millones, respectivamente, y 800 toneladas de Paraguay, por US$ 2,8 millones.
Esta importación marcó un aumento del 183% respecto de las 2.300 toneladas de 2022, que costaron US$ 9,2 millones.
Entre 2021 y 2022 ya se había observado un importante aumento del 237% en las importaciones, con un costo de 2,3 millones de dólares. En los primeros dos meses de 2024, el Estado importó 250 toneladas a un costo de US$ 799.000.
