En la tarde de ayer un comunicado del gremio lechero encendió las alarmas del sector, la convocatoria a un paro de 48 hs. para jueves y viernes, y el quite de colaboración para sábado y domingo elevaron la temperatura de la tarde del martes.

La medida fue dispuesta luego de la primera reunión que mantuvieron las partes con el nuevo Ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni. Durante dicha reunión el funcionario dijo estar al tanto del conflicto, pero pidió que entendieran que recién asumía y lo hacía en medio de cambios importantes y urgentes, como tener que ir al Congreso a explicar el nuevo paquete de medidas que se debate por estas horas, por lo que les pidió a las partes involucradas en el conflicto un poco más de tiempo para interiorizarse en los detalles.

Ambas partes entendieron la situación planteada por el Ministro y quedan en retomar las negociaciones. Hasta aquí las versiones son las mismas, tanto de fuentes gremiales como de industriales, luego las partes tienen versiones con matices.

Un industrial nos informo que el Ministro propuso que se salde la diferencia salarial que el gremio pide, y a su vez pidió al gremio que deje de lado el planteo por el aporte extraordinario, para que de esa forma pueda alcanzarse un acuerdo.

Los representantes gremiales, aseguran que no se habló de eso, sí de dar tiempo, pero que cuando llegan a la sede e informan lo sucedido en la reunión, se encuentran con un reclamo muy fuerte de los Delegados de continuar con las medidas aprobadas en las asambleas, por eso el anuncio de nuevas medidas.

En la tarde, luego del lanzamiento del paro hubo un nuevo llamado desde el ministerio para que las partes se sienten mañana a las 14 a tratar de llegar a un acuerdo.

Versiones extra oficiales indican que la industria llevaría una propuesta concreta de un incremento de un 15% para diciembre, otro 15% para enero y un bono de $ 5.000, pero ningún incremento para los aportes extraordinarios. Veremos cómo cae esta nueva propuesta empresarial.