El último informe de precios muestra una dinámica mixta en los mercados internacionales. Mientras la leche en polvo registra una leve suba, la mantequilla y el queso experimentan una corrección en un entorno de alta volatilidad.
El mercado global de productos lácteos se encuentra en un momento de señales contradictorias, según los últimos informes de precios provenientes de la Unión Europea y la plataforma de subastas Global Dairy Trade (GDT). Mientras que la cotización de la leche en polvo entera, un producto de referencia global, se ha revalorizado, otros productos como la mantequilla y el queso han experimentado una leve corrección a la baja. Este panorama mixto exige una atención especial de los productores, procesadores y analistas del sector.
En el mercado europeo, las cotizaciones han mostrado una tendencia descendente en las últimas semanas. La mantequilla cerró la segunda semana de agosto en 712 euros por 100 kg, con una caída del 1.9% en el último mes. De manera similar, la leche entera en polvo (WMP) y el queso cheddar también registraron descensos, con una variación de -1.0% y -1.5% respectivamente. Estas cifras, provistas por el Observatorio del Mercado Lácteo de la UE, reflejan una ligera desaceleración en un mercado que había mantenido precios elevados.
Por otra parte, la última subasta de la plataforma GDT, liderada por la cooperativa neozelandesa Fonterra, arrojó un resultado diferente. A pesar de las caídas en el queso (-0.6%) y la mantequilla (-3.8%), el índice de precios general mostró una subida del 0.7%. Este incremento fue impulsado por la cotización de la leche en polvo entera, que subió un 2.1%, confirmando su posición como el principal motor del mercado.
La dinámica actual de los precios refleja las complejas interacciones entre la oferta y la demanda a nivel mundial. El informe destaca que países como Estados Unidos mantienen una ventaja competitiva en los precios del queso y la mantequilla, mientras que Nueva Zelanda lo hace en las leches en polvo. Esta competencia regional, sumada a la volatilidad en la demanda de importación y a los niveles de stock globales, contribuye a un mercado impredecible, donde las variaciones de precios son constantes y exigen una gran capacidad de adaptación.
En conclusión, el estado del mercado lácteo internacional es un mosaico de tendencias. Mientras que la estabilidad de los precios del queso y la mantequilla parece tambalear, la leche en polvo se mantiene como un producto con un comportamiento más dinámico, a veces impulsando al alza el índice global. Para los productores de leche y los industriales, este panorama demanda un seguimiento exhaustivo de los movimientos del mercado, así como una planificación estratégica para mitigar los riesgos y capitalizar las oportunidades que surgen de la volatilidad actual.
Fuente: Campo Galego
