La falta de energía paraliza la producción y genera pérdidas de materia prima. Los más afectados son los que requieren un sistema de refrigeración para resguardar la vida útil de los productos.
“Es una verdadera tragedia nacional. Son pérdidas frágiles que son irreversibles y en esos días se dejó de producir“, manifestó Luis Prado, vicepresidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga).
Uno de los principales rubros que se ve comprometido con la interrupción de la luz es la producción de leche. Prado calcula que deben ser alrededor de 38 millones 500 mil litros de leche, perdidos o dejados de producir por los siete días improductivos de marzo: las 168 horas sin electricidad que sufrió el país.
“La mayor afectación ha sido el caso de la producción de leche, porque el productor requiere de la producción para pagar la nomina, comprar, insumos, comprar la comida de trabajadores”, expresó Prado.
Este cálculo deriva de que, como indicó, al día en Venezuela se suelen producir alrededor de 5,5 millones de litros de leche, de los cuales aproximadamente 50 % de ese total se vende para para la preparación de quesos; el grueso de la productividad. Un 28% se destina a la venta líquida del lácteo y el resto para queseros artesanales.
La afectación al productor de leche está en dos vías: el deterioro del producto y en el deterioro del mercado. “Esa leche que no se está comprando el quesero artesanal, porque se perdió, significa una pérdida de productos que no van al mercado”, explicó.
Ganaderos afectados
También se afectó la producción de cárnicos. El problema está concentrado en la incapacidad de refrigerar los productos a falta de energía eléctrica.
“Hubo pérdidas porque la capacidad de los ganaderos es de refrigeración no congelación. La carne les dura lo que dura un bistec en la nevera, se produce deterioro de la carne, va perdiendo características y peso”, dijo Prado.
En Venezuela se matan alrededor de 80 mil reses al mes. Un proceso que incluye una cada de comerciantes involucrados: ganadero, matadero, el mayorista que vende a las carnicería y el carnicero.
Por los propios apagones los precios de los cárnicos y derivados bajaron. Sin luz, existía desconfianza para los compradores. Además, al no poder vender, ofrecen los productos a un precio menor, que genera pérdidas en los costos de reposición.
“Muchos carniceros regalaron la carne, que pérdida para los ganaderos. Esa pérdida se queda en la cadena cárnica, la pierde el productor o el ganadero o el matadero o el mayorista o el carnicero”, dijo.
Para el dirigente gremial apuntó que las perspectivas del sector son negativas. La productividad se verá comprometida cuando se recobre un estado de mayor normalidad en el país.
Temporada de sequía
El periodo de sequía que atraviesa el país de noviembre a mayo es otro factor que influye en la operatividad del sector. Esta temporada, que es típica y ante la cual suelen prepararse, se le sumó los problemas eléctrico.
“La condición de sequía en la que estamos ocasiona que la producción se minimice. Marzo de por sí es un mes crítico, pero ahora se ha agravado la situación”, aseguró el productor.
Los sistemas de bombeo de agua en las fincas, que en su mayoría funcionan con energía eléctrica, se ven paralizados por los apagones. La calidad del pasto se ve afectada. La producción de leche y cárnicos disminuye.
“Normalmente en el periodo de sequía la producción de leche baja por la calidad del pasto, y el ganado gordo baja”, indicó.
Los otros sistemas de bombeo, que funcionan con un proceso de combustión y se alimentan de combustible, con los cortes eléctricos se comprometen. El combustible escasea.
Pérdidas incalculables
Se dejó de producir. En la producción general las pérdidas por estos siete días a oscuras son incalculables. Así lo aseguró Vito Vinceslao, primer vicepresidente del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio).
“Sufrimos pérdidas incalculables hasta los momentos, en diferentes sectores. Sufrimos pérdidas económicas por tema de refrigeración y por hechos vandálicos”, señaló Vinceslao.
Apuntó a que de manera general todos los estado del país resultaron afectados, sin embargo, señaló a Zulia, Trujillo, Táchira, Barinas, Carabobo y al oriente venezolano como los de pérdidas más sensibles.
Vinceslao acusó al gobernante Nicolás Maduro de la responsabilidad de las pérdidas que sufre el sector. Además, lo instó a tomar las medidas necesarias para que sector no se vea comprometido.
“Quienes están al mando tiene que ser responsables ante la situación que estamos viviendo”, expresó.
Las afectaciones que sufre el sector es un peso más sobre los problemas que ya llevan a a cuestas: hiperinflación, falta de equipos, éxodo de personal, falta de inversión y bajas en la productividad.
“Ya venimos en continuas pérdidas desde hace bastante tiempo. Veníamos vendiendo por debajo de los costos de producción. Cada día tenemos muchos más comercios cerrados”.